En un mundo de relativa oscuridad, lo que no significa ni triste ni tétrico, sino todo lo contrario, unos divertidos personajes han hecho un hallazgo de lo más interesante, han descubierto la luz. Si este mundo sin luz ya era distraído, pues ahora con ese descubrimiento es trepidante.
No podríamos ni imaginar el provecho que estos dinámicos personajes le pueden sacar a su nuevo juguete. Nos introducimos en su mundo, donde predomina el pasárselo bien; un mundo poético, visual e imaginativo, donde todo es posible, incluso, convertir la luz en fuego.
